Resistencia
y pasión. Son las dos cualidades imprescindibles que los organizadores de un Futures
deben tener para sobrevivir en tiempos de socavón económico como lo que estamos
padeciendo en nuestro país desde hace ya varios años. Digo resistencia porque
hoy por hoy no queda más remedio que hacerse fuertes y aguantar a pie firme
para mantener el proyecto con vida, aunque eso signifique dar varios pasos
atrás tras muchos años de poner toda la carne en el asador en el intento por
convertir tu torneo en referencia con el fin de consolidarlo dentro del
calendario nacional e internacional.
El
objetivo ahora no es otro que aguantar para, cuando vuelvan tiempos mejores,
volver a crecer y recuperar el terreno perdido por causas macroeconómicas, en
las que, salvo excepciones, poco podemos hacer. También hablo de pasión porque
no de otra forma se entiende convertir el tenis, en su escala de base,
prácticamente en un modo de vida que te resta tiempo, vida familiar y,
seguramente, recursos económicos propios esperando, a cambio, un beneficio más
bien escaso, si es que termina llegando.
Este
'modus operandi', que puede parecer
hasta irracional, es la norma común en el mundo de los Futures, la primera
línea de fuego en el camino hacia el superprofesionalizado mundo del ATP World
Tour y el circuito WTA, la élite del tenis, con sus patrocinadores millonarios
y sus propias fortalezas y debilidades -que también existen- como se pudo
comprobar hace un par de años con la desaparición del Andalucía Tennis
Experience, el magnífico torneo que dirigía la actual capitana de Copa
Federación, Conchita Martínez, en Marbella.
El
caso del Open Ciudad de Pozoblanco que organiza el Club de Tenis Pozoblanco, es
paradigmático del sinuoso y escarpado camino que estamos transitando. Este año
'baja' un escalón para pasar de la categoría Challenger a la de Futures. Un
giro que, sin embargo, hay que interpretar en clave de fortaleza. El Future 28
Open Ciudad de Pozoblanco resiste el envite colosal de la crisis. Eso es lo
esencial y significativo. No hace mucho,
en 2011, estábamos hablando de un Challenger dotado con 150.000 dólares en premios;
100.000 en categoría masculina y 50.000 para la femenina. La edición de este
año es mucho más humilde en cuanto a presupuesto y organización: 15.000 dólares
en premios y solamente cuadro masculino en liza. El recorte económico existe
pero yo prefiero ver el vaso medio lleno: la continuidad de un torneo con
tradición e historia. La primera premisa es resistir el huracán. Ya llegarán
tiempos mejores.
La
crisis obliga a la economía de subsistencia. Según datos de la Federación
Internacional de Tenis (ITF), en 2012, el ITF Pro Circuit tuvo un calendario
compuesto por 582 torneos en categoría masculina celebrados a lo largo y ancho
de 72 países y 484 reservados para las mujeres en un total de 63 naciones. Esta
temporada no se pueden hacer cálculos exactos de los Futures que se disputarán
finalmente porque cada mes se cancela alguna cita prevista por falta de
recursos. Diciembre será el momento de hacer balance.
Lo
que sí sabemos es que en España, clubes y organizadores siguen apostando fuerte
contra y viento y marea. El Open Ciudad de Pozoblanco es un Futures 28, de los
33 que están previstos este año en el calendario nacional. Sólo en agosto se
jugarán torneos masculinos en Ourense, Vigo, Bejar, Xativa y Pozoblanco dentro
de una previsión general que contempla 101 Futures este mes en el calendario
internacional. De los cinco que se disputan en España, el cordobés es el que
tiene una mayor dotación económica (15.000 dólares, la mayoría pone el límite
en 10.000).
El
panorama en el caso femenino es mucho peor. En todo agosto no hay torneo
femenino previsto en nuestro país de los 54 que están inscritos en la web de la
ITF, teniendo en cuenta las cancelaciones que ha habido en Tesalónica y
Vinkovci.
Siendo
grave, la situación en nuestro país esboza algunas líneas optimistas. La falta
de recursos económicos afecta a todos. Es una epidemia de la que prácticamente
no se libra nadie. Según datos oficiales de la propia ITF, en Francia este año
están previstos 18 Futures; en Italia, 28; en Gran Bretaña 19 y en Alemania,
13. En España, se jugarán 33, una cifra solamente superada por Turquía en lo
que podríamos considerar 'territorio europeo', que tiene anunciados 39. En
Portugal y Grecia, dos compañeros de fatigas en esto de la economía, hay
marcados ocho y nueve respectivamente y ninguno de ellos alcanza los 15.000
dólares.
Como
siempre, el panorama en el circuito del viejo continente femenino es mucho más
débil: catorce torneos anunciados en España por los 37 de Turquía o los 21 de
Francia. Asignatura pendiente, sin duda alguna.
Cierto
es que no podemos estar contentos porque en el país de los ciegos, en España
seamos los tuertos pero tampoco podemos sumergirnos en la depresión absoluta.
El ejemplo del Open Ciudad de Pozoblanco debe ser inspirador de cómo se están
haciendo las cosas y cómo se quieren seguir haciendo para que el circuito
Futures, fundamental en el desarrollo de los tenistas profesionales, siga
contando con una razonable salud. En vez de arrojar la toalla y echar el
cierre, se ha apostado por el camino más difícil pero también el más bonito:
resistir, mantener viva la llama del tenis; seguir con la cancela abierta para
que el tenis modesto tenga espacio suficiente. Hablamos de tenis modesto pero a
mi me gusta hablar más de tenis de formación.
Los Futures son terreno propicio
para los gladiadores de este deporte pero también para muchos jóvenes jugadores
que ven en ellos la oportunidad de coger puntos, algo de dinero para iniciar su
carrera profesional y sobre todo, experiencia. El trayecto hacia el ATP World Tour
comienza en este tipo de eventos. Si mueren o los dejamos morir, estamos
acabando con gran parte de las posibilidades de una generación entera de
jóvenes tenistas que sueñan algún día con levantar la Copa de los Mosqueteros
en la pista central de Roland Garros. El camino hacia Paris, Londres, Nueva
York o Melbourne pasa inexcusablemente por Pozoblanco. Comprender eso es
fundamental si queremos mantener un tenis vivo, pujante y con 'Futures'.
* Desde el Club Tenis Pozoblanco, agradecemos a Israel por su gran artículo y porque desde el primer momento, la disponibilidad fue absoluta.
* Artículo en formato pdf de la revista oficial del Open Ciudad de Pozoblanco COVAP 2013.
Artículo escrito por Israel Garcia Montejo, fundador de la revista Tenis World para el Open Ciudad de Pozoblanco COVAP 2013
@israelgmontejo